Un pedacito de Levrero (1998)
“En cuanto a herir a otros... no es algo que vos desees, ni es una consecuencia necesaria de tus actos. Más bien hay que pensar que alguien podría lastimarse a sí mismo con el pretexto de tus acciones, lo cual no es buena política, no es sana. Creo que nadie puede renunciar a su libertad y más aún, a su mismidad, por el temor de que alguien se lastime con el cuchillo que inocentemente dejamos sobre la mesa para cortar el pan.”
Comentarios
Luego llegué a ir a un lugar a ver a una mujer, es borroso mi recuerdo, creo que abajo del palacio Salvo. Me inscribí en aquel taller pero enseguida tuve que viajar por lo que nunca asistí. Sólo quería hacerte este comentario.
Leí de él solamente "El discurso vacío" y me fascinó. ¿Sabes como podría hacer para leerlo o como conseguir un libro estando aquí en México?
Saludos
Pd: Me tomé el atrevimiento de agregar tu blog a mis favoritas.
beso, f
pd: qué divino, cómo lograba que uno abandonara la culpa en un santiamén, juas!